La cocaína, la droga que origina un mayor gasto sanitario en Cataluña, ya es la más consumida de las denominadas drogas duras. Más de 260.000 catalanes, el 4,2% de la población, reconoce haberla probado en alguna ocasión, de acuerdo con los últimos informes que maneja el Departamento de Sanidad.
Aunque los expertos consideran que el consumo de esta droga tiende a estabilizarse en Cataluña, los últimos datos todavía no son optimistas. El 2,8% de catalanes entre 15 y 65 años de edad había consumido cocaína en los últimos 12 meses, mientras que el 1,4% lo había hecho en el último mes, según reflejan datos Sanidad de 2001.
Así, el 3,2% de la población catalana había probado cocaína (datos de 1999), mientras que el 1,8% declaró que la había consumido en el último año y el 1% reconoció haberlo hecho en los últimos 30 días. Este último grupo de personas es el que se considera con más riesgo de adicción a esta droga.
En el caso de los más jóvenes, las cifras demuestran que el consumo de cocaína en los últimos años se ha reducido ligeramente.Así, el 6% de catalanes de entre 14 y 18 años había probado en alguna ocasión esta sustancia adictiva en 2001, mientras que dos años atrás la había consumido el 6,8%.
Actualmente, la cocaína se sitúa en tercer lugar en el consumo de sustancias adictivas, por detrás del alcohol y la marihuana. En los últimos años, la cocaína, que se consume más que las drogas sintéticas, ha desbancado a la heroína, muy consumida durante las décadas de 1970 y 1980.
El perfil del consumidor de cocaína que acude a los centros de la red de drogodependencias de la Generalitat es mayoritariamente hombre, en el 85%, con una edad media de 29 años, y estudios medios en el 23% de pacientes, explicó el director general de Drogodependencias, Joan Colom.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 15 de febrero de 2003