Al menos 18 personas murieron, 45 sufrieron heridas y 60 viviendas resultaron dañadas al explotar una bomba en una casa de Neiva, a 300 kilómetros al sur de Bogotá. La policía sospecha que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) preparaban un atentado contra el avión del presidente Álvaro Uribe. Fuentes oficiales informaron de que en la explosión murieron, entre otros, una fiscal, nueve policías y cinco civiles.
La explosión se produjo en una vivienda de un barrio popular de Neiva poco antes de las 5.30 (hora local) y afectó a un radio de 500 metros. Las autoridades, que atribuyen la acción a guerrilleros urbanos de las FARC, temen que a medida que se realicen las tareas de desescombro, en las casas vecinas afectadas, puedan aparecer más muertos. Los heridos -entre ellos, ocho niños- fueron trasladados a distintos centros sanitarios de la capital de Huila, una ciudad con una fuerte presencia de milicianos de las FARC.
La explosión se produjo en una vivienda de un barrio cercano al aeropuerto, mientras se registraban varias casas sospechosas de esconder bombas. En el momento de la explosión se hallaban en el interior de la casa varios funcionarios judiciales, agentes de policía y civiles.
El director de la Fiscalía de Huila, Hernando Valenzuela, declaró que en esa casa se estaba preparando un atentado contra el avión del presidente Álvaro Uribe, que visita hoy la ciudad. "Se tenía conocimiento porque habían colocado en ese sector unas plataformas para derribar el avión del señor presidente que ha anunciado su visita a la ciudad de Neiva", dijo. El director de la policía colombiana, general Teodoro Campo, dijo que el presidente no ha cancelado su visita a la ciudad. Allí Uribe presidirá un Consejo Comunal de Gobierno, como parte de los encuentros habituales de fin de semana del mandatario con autoridades locales y habitantes de distintas ciudades para hablar de problemas que afectan a la población y de sus posibles soluciones.
Contra Uribe
El alto mando policial viajó tras el atentado desde Bogotá a Neiva, donde declaró a los periodistas: "Puede ser una interpretación, pero creemos que querían destruir un avión". El general Campo explicó que la carga explosiva estaba en el patio de la casa y enfilada a la pista de aterrizaje: "Todo hace pensar que era una acción dirigida a una aeronave". Añadió Campo: "Las características del hecho y una serie de evidencias nos permiten hacer la aseveración contundente en contra de la organización terrorista" de las FARC. Para Campo, todo apunta a que el atentado ha sido preparado por hombres de la columna móvil Teófilo Forero de esta organización.
Tropas de la Novena Brigada del Ejército, así como efectivos de la Policía y del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS, los servicios secretos) han desplegado un gigantesco operativo para tratar de capturar a los presuntos responsables.
Esta explosión se produce una semana después de que un coche bomba dejara un saldo de 35 muertos y alrededor de 162 heridos en Bogotá, un atentado atribuido por la Administración de Uribe a las FARC.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 15 de febrero de 2003