El Ministerio de Hacienda está preparando una nueva Ley de Patrimonio con el objetivo de agilizar y modernizar los sistemas de contratación del patrimonio del Estado y poder reducir así la tasa de alquiler de los inmuebles que ocupa, algunos incluso durante varias decenas de años, informan fuentes de este departamento. Según estas mismas fuentes, la norma actual data del año 1964, por lo que ya se ha quedado "desfasada" y, en muchas ocasiones, resulta poco eficiente, sobre todo en el actual contexto de descentralización autonómica y local y bajo el objetivo irrenunciable del Gobierno de mantener en el tiempo el equilibrio de las cuentas públicas. Así, Hacienda pretende estrechar el control sobre los bienes públicos y racionalizar el coste que conlleva el uso del patrimonio del Estado.
Por ello, el Gobierno se ha propuesto reducir la tasa de alquiler de los inmuebles que utiliza la Administración Central mediante la compra de edificios o sustituyéndolos por otros pertenecientes al Estado y que estén desocupados o mal aprovechados. En este momento, la Dirección General de Patrimonio posee más de 40.000 inmuebles. El departamento que dirige Cristóbal Montoro considera que no tiene sentido mantener edificios alquilados durante un periodo de tiempo muy largo si se trata de inmuebles destinados a servicios públicos fijos y con vocación de permanencia en el tiempo.
En cualquier caso, pese a la reordenación que se llevará a cabo en el patrimonio del Estado, fuentes de Hacienda explicaron que no se abandonarán los edificios públicos más emblemáticos o históricos. Además, la nueva ley, que está ya en fase de contraste con otros ministerios, contempla la creación de una comisión de coordinación que analizará por comunidades autónomas, provincias y municipios el patrimonio del Estado y de los gobiernos autonómicos y locales para ver qué posibilidades de intercambio o de traspasos pueden realizarse.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 24 de febrero de 2003