En el barrio bilbaíno de Arangoiti vivimos unas 5.000 personas y tenemos un medio de acceso del que no podemos prescindir por su situación geográfica. El ascensor está regentado por una empresa privada que no tiene interés en mejorarlo ni, lo que es más grave, mantenerlo con unas mínimas medidas de seguridad. Estos días de lluvias el problema de abandono ha aumentado considerablemente, porque el pasillo de entrada se ha inundado, uno de los ascensores ha quedado inutilizado y el otro no se ha podido utilizar en todo el horario por problemas de humedades y saturación.
Se han presentado ya 1.300 firmas en el Registro del Ayuntamiento, al que pedimos que que tome cartas en este asunto y ser haga cargo de este servicio imprescindible.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 25 de febrero de 2003