El túnel del Mont Blanc, que une Francia e Italia, y en el que murieron 39 personas en marzo de 1999 tras un incendio, ha recuperado su uso normal tras concluir ayer el sistema de circulación alterna, por un acuerdo entre París y Roma.
Este sistema, que entró en vigor en junio pasado, impedía que los camiones de más de 3,5 toneladas de peso se cruzasen en el túnel, pues sólo podían circular en un único sentido, que se variaba cada 45 minutos. Su finalización persigue equilibrar el tráfico de camiones entre este túnel y el de Frejus, el otro gran eje de comunicación entre Francia e Italia.
Después del incendio, el paso permaneció cerrado durante tres años, para acometer obras de reparación y mejora del mismo y de sus medidas de seguridad. Hace un año, el túnel fue reabierto al tráfico de automóviles y pequeños camiones, tres meses después al resto de vehículos pesados, y se impuso el sistema de circulación alterna, además de otras medidas de seguridad, como la limitación de velocidad y el aumento de la distancia entre vehículos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 2 de marzo de 2003