UPN vuelve a acumular pronunciamientos adversos a su política monolingüe en lengua castellana impulsada desde el Gobierno de Navarra y el Ayuntamiento de Pamplona. El Tribunal Superior de Justicia de Navarra (TSJN) ha dictado una sentencia en la que señala que la rotulación de los edificios municipales y las calles del centro histórico de la capital debe ser bilingüe, en euskera y castellano, respetando la ordenanza municipal de 1997. El TSJN desestima así un recurso del Ayuntamiento, gobernado por UPN, argumentaba que el monolingüismo en la rotulación venía impuesto por el decreto foral 372/2000 aprobado por el Gobierno navarro.
Los jueces recuerdan que tal decreto ha sido anulado por tres sentencias consecutivas de su Sala de lo Contencioso Administrativa en junio y julio de 2002, y señalan que la ordenanza municipal sobre uso del euskera no puede ser derogada por el Gobierno foral, ya que no existe tal supeditación jerárquica. La sentencia aclara que ambas instituciones regulan ámbitos diferentes, según lo dispuesto en la ley foral del Vascuence de 1986.
Para evitar este tipo de sentencias (los jueces obligaron al consistorio a editar en los dos idiomas el programa de fiestas de San Fermín) mañana lunes el Ayuntamiento analizará una propuesta de modificación de su actual ordenanza sobre el euskera, con la que pretende reducir la exigencia legal del conocimiento del vascuence en la provisión de algunos puestos de trabajo municipales.
Por otro lado, la Defensora del Pueblo de Navarra ha dictado una recomendación al Gobierno foral en la que le solicita que edite de forma bilingüe la información cultural que vaya dirigida al conjunto de la población, según lo establecido en el artículo 12 sobre actividades y servicios culturales de la Carta Europea de las Lenguas Regionales y Minoritarias. UPN viene editando únicamente en castellano la información cultural de los Festivales de Navarra, su apuesta cultural anual más destacada.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 2 de marzo de 2003