La Cámara de Comercio de Barcelona advirtió ayer de que las empresas catalanas necesitan trabajadores con un nivel formativo cada vez más alto. Ésta es la principal conclusión del informe del Observatorio de la Formación, que presentó ayer la institución por segundo año.
El estudio, realizado por la empresa BCF Consultors, indica que entre 1977 y 2001 el porcentaje de personas ocupadas sin estudios o con estudios primarios bajó del 75,2% al 25,7%, mientras que la población ocupada con estudios secundarios o superiores pasó del 24,8% al 74,3%. A pesar de ello, el informe también revela que la cifra total de trabajadores de baja cualificación ha aumentado a causa de las necesidades de ocupación de sectores como la construcción, la hostelería y el turismo, el mantenimiento industrial y el transporte.
El estudio cifra este aumento en 77.000 personas en el periodo 1994-2000, aunque el director del estudio, el profesor de la Universidad de Barcelona Ezequiel Baró, asegura que "sería superior si se incluyesen los inmigrantes irregulares, que no aparecen en las estadísticas".
El informe, basado en una encuesta realizada a 1.200 empresas, también destaca un aumento de la relación entre la creación de puestos de trabajo y el crecimiento económico, un mayor impacto de la ocupación en el sector servicios y en actividades de alta tecnología y el incremento de la población ocupada femenina.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 5 de marzo de 2003