La ministra de Educación, Pilar del Castillo, explicó ayer para qué servirá a los alumnos estudiar la asignatura alternativa a la religión, es decir, la no confesional: "Con esta materia tendrán la oportunidad de estudiar el impacto que el hecho religioso ha tenido en la conformación de las culturas y las civilizaciones. Entenderán, así, la pintura de inspiración religiosa, como la de El Greco; la Novena sinfonía de Beethoven, o lo que significa Buda para determinadas culturas".
Del Castillo explicó que las horas dedicadas a la asignatura de religión confesional son exactamente las mismas que las establecidas en la actualidad. Pero reconoció que en el caso de la alternativa a la religión se agruparán todas esas horas que antes los alumnos dedicaban a actividades como recreo, manualidades u horas de estudio cuando escogían no dar religión. Del Castillo señaló que el perfil idóneo del profesorado que imparta la asignatura de religión no confesional serán los de geografía, historia y filosofía, sin perjuicio de otros docentes que tengan la formación adecuada.
La ministra explicó que con la Ley de Calidad se crea por primera vez una asignatura de ética, obligatoria y evaluable en cuarto curso de la ESO para todos los alumnos.En los borradores de los reales decretos que desarrollan la LOCE se explica que la opción no confesional de la asignatura de religión contribuye a la formación humanística de los alumnos, que completan con ella los conocimientos adquiridos en otras asignaturas; fomenta la lectura de documentos que contienen leyendas, narraciones, discursos doctrinales o poesía religiosa; estimula el ejercicio de valoración estética de las manifestaciones artísticas de lo religioso y el uso de las tecnologías de la información para "facilitar el acceso y conocimiento de todo ese rico patrimonio".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 8 de marzo de 2003