La juez de Instrucción número 2 de Puerto Real (Cádiz) ha decidido aplazar el careo que tenía previsto celebrar esta semana entre la presidenta de la Junta de Personal del Ayuntamiento de Cádiz, Rosario Carrero, y los dos sindicalistas a los que citó como imputados por la agresión y supuesta violación que sufrió la representante laboral en su propio domicilio a mano de dos encapuchados. Carrero está ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital de Puerto Real después de que el sábado se fracturase un fémur y varias costillas tras caer desde el segundo piso de su vivienda. Según relató la víctima, fue empujada por dos personas. Estos testimonios contrastan con la versión de familiares y vecinos que negaron la presencia de extraños en el lugar de los hechos.
La juez sí tomó declaración en calidad de testigo a Joaquín Sánchez, amigo y compañero de Carrero en el Sindicato de Trabajadores Públicos. Mientras tanto, la Subdelegación del Gobierno y el Ayuntamiento de Cádiz permanecen sin ofrecer una versión o postura oficial sobre la sucesión de acontecimientos, bajo los que subyacen las luchas internas de los sindicatos municipales.
La alcaldesa Teófila Martínez negó ayer que el gobierno local, del PP, mantenga una actitud pasiva ante estos hechos. "Estamos adoptando una actitud respetuosa porque no podemos intervenir en las investigaciones. Niego que estemos teniendo una actitud pasiva. Estamos perfectamente informados por la juez y por la policía en lo que podemos conocer. No soy ninguna insensata como alcaldesa de la ciudad. Son cuestiones que nos preocupan y nos ocupan, que estamos encima de ello, pero al estar sub iúdice estaría muy mal visto que interviniéramos".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 11 de marzo de 2003