Iberdrola rechaza la OPA de Gas Natural

La eléctrica Iberdrola rechazó ayer por "hostil", sorpresiva y escasa la oferta pública de adquisición de acciones (OPA) lanzada el pasado lunes por Gas Natural sobre el 100% de su capital. Desde que conoció la ofensiva, Iberdrola se ha movido en el mercado nacional e internacional para explorar vías de defensa, encontrar un posible "caballero blanco" y contrarrestar la ofensiva. A la OPA, por un importe global de 15.384 millones de euros, se opone el principal socio industrial de la empresa gasista, Repsol YPF, por el momento y la forma en que se ha llevado a cabo, y lo apoya el otro socio principal, La Caixa.

En el día de después, pleno de declaraciones, reacciones y comunicados, Repsol YPF celebró un consejo de administración extraordinario por la tarde que se prolongó durante casi cinco horas y al que asistieron, como consejeros, Antoni Brufau, presidente de Gas Natural, y Josep Vilarasau, presidente de La Caixa, que controla el 12,5% de la petrolera y el 26,1% de Gas Natural.

La reunión de consejeros estuvo rodeada de morbo dado el enfrentamiento La Caixa-Gas Natural y Repsol YPF-Iberdrola. Con el elemento añadido del voto contrario a los intereses de Repsol YPF que realizó el lunes en el consejo de Gas Natural José Luis López de Silanes, hombre nombrado por el presidente de Repsol YPF, Alfonso Cortina, y que inclinó la balanza por siete votos contra cinco del lado de los intereses de La Caixa.

El consejo había sido convocada por Cortina el pasado domingo, tras conocer la decisión de Gas Natural de lanzar una OPA sobre Iberdrola. Al término de la reunión, este órgano refrendó por mayoría las posiciones expresadas por Cortina en contra de la oferta de Gas Natural. Cortina argumentó que hubiera sido necesario consensuar la fusión y haber considerado en mayor medida el contexto de incertidumbre en el que se mueven las empresas en estos momentos. El órgano de administración hizo público un comunicado en el que ambas partes, Repsol y La Caixa, expresaron "la voluntad conjunta de modificar los pactos que mantienen en Gas Natural para adaptarlos a los posibles escenarios futuros".

Una decisión ambigua

El punto es lo suficientemente ambiguo para dar lugar a interpretaciones. Los pactos vigentes entre La Caixa y Repsol establecen la paridad en el consejo (igual número de consejeros por ambas partes), el nombramiento del presidente de Gas Natural por parte de La Caixa y la designación del consejero delegado por parte de Repsol.

El consejo de Iberdrola, por su parte, se celebró por la mañana y duró tres horas. A su término, la eléctrica que preside Íñigo Oriol calificó la operación anunciada por Gas Natural de "hostil" y rechazó la oferta con cuatro escuetos argumentos: el primero, "sorpresa por la naturaleza y el modo de presentación de la propuesta"; el segundo, escasez de la oferta económica (17 euros por acción, pagaderos el 40% en metálico y el 60% en acciones nuevas de Gas Natural), que "queda muy lejos de reflejar el valor real de Iberdrola, SA"; el tercero, preocupación porque "aspectos tan importantes como los regulatorios no han sido suficientemente estudiados ni valorados", y el cuarto y último, constatación de que el mercado no ha recibido con buenos ojos la oferta planteada por la compañía gasista.Ayer, Gas Natural recuperó parte de la fuerte pérdida registrada el lunes al conocerse la operación (cayó un 13,12%) y ganó un 2,8%, con lo que cerró a 15,74 euros. Por su parte, Iberdrola, que el lunes ganó un 1,13%, perdió un 0,14% y cerró a 14,36 euros por título. La agencia de calificación Moody's decidió revisar los ratings de ambas empresas para su posible rebaja, algo que hizo también el lunes Standard & Poor's.

También ayer, la caja vasca BBK, accionista de Iberdrola (7,5%) y de Gas Natural (3%), se sumó oficialmente al frente de quienes se oponen a la OPA hostil sobre la eléctrica (Repsol, con el 24% de Gas Natural; el BBVA, con el 9,14% de Iberdrola y el 2,8% de Gas Natural, y la propia BBK). En un medido comunicado, la caja expresó su "desacuerdo con el método empleado por Gas Natural", recurriendo a una "OPA de carácter hostil", y recordó su compromiso de defensa del valor de la acción de Iberdrola "para sus accionistas", advirtiendo de paso que "muchos de ellos son clientes de la caja".

Al igual que Repsol, la BBK cuestionó más el método elegido para llevar a cabo la operación que la operación en sí misma, que podría dar lugar a la tercera empresa europea por capitalización bursátil, sólo por detrás de la italiana Enel y de la alemana E.ON. De esta forma, BBK se suma a la posición del BBVA. Entre los dos cuentan con el 16,5% de Iberdrola, por lo que, de acuerdo con las condiciones de la OPA, les falta un 8,5% para alcanzar el 25% necesario para abortar la operación.

Naturcorp

Por parte del Gobierno vasco, su portavoz, Josu Jon Imaz, aclaró que la OPA sobre Iberdrola no incidirá en el proceso de privatización del sector gasístico de Euskadi (Iberdrola aspira a la compra de la sociedad pública Naturcorp) y confió en que no repercutirá en la libre competencia ni en los derechos de los consumidores vascos.

Según aclaró el portavoz, el anuncio de OPA "no tiene nada que ver con el proceso de privatización de Naturcorp", a cuya compra aspiran Iberdrola, Gas Natural, Hidrocantábrico

y el grupo italiano ENI.

Imaz insistió en que la operación que plantea Gas Natural "es un proceso independiente y no incide" en la privatización de Naturcorp, por lo que añadió que el Gobierno vasco decidirá "con transparencia" sobre la venta de esta sociedad antes del 30 de marzo.

Aparentemente, el anuncio del Gobierno vasco pincha algunos de los análisis realizados en torno a la OPA de Gas Natural y que apuntaban a la privatización de Naturcorp (a favor de la eléctrica Iberdrola) como uno de los detonantes de la operación lanzada por la compañía gasista con el apoyo de La Caixa.

Las asociaciones de consumidores también se pronunciaron sobre la operación. Cuatro de las principales organizaciones -CECU, UCE, CEACCU y FACUA- se dirigieron al Gobierno para solicitar que se tenga en cuenta a los consumidores y se evite la creación de monopolios encubiertos.

También los sindicatos reaccionaron ante la noticia. UGT solicitó una reunión a los presidentes de Gas Natural e Iberdrola para conocer de primera mano el alcance de la operación. Por su parte, el secretario general de CC OO, José María Fidalgo, advirtió, según Efe, que ve "con preocupación" las agrupaciones de empresas.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 12 de marzo de 2003