Los términos en torno al conflicto con Irak se han suavizado lo suficiente como para que los inversores hayan considerado la posibilidad de un repunte serio a corto plazo en los mercados de valores.
El dinero ha comenzado a moverse, aunque en general se ha limitado a los grandes valores, los que cuentan con mayor liquidez y, por tanto, aseguran la posibilidad de dar marcha atrás en cualquier momento, ya que en el fondo los inversores no las tienen todas consigo y lo que se plantea como novedad es un simple retraso en los planes de Estados Unidos. La contratación en el Mercado Continuo ascendió a 2.274,11 millones de euros, con sólo 500 millones en operaciones institucionales.
En el mercado español se registró la mayor subida del año, con un 4,13% en el Ibex 35 y el 3,65% en el índice general de la Bolsa de Madrid, con lo que en las dos últimas sesiones estos indicadores han recuperado el 8,30% y el 7,21%, respectivamente. Con esos resultados el saldo semanal también es positivo, rompiéndose así una racha muy negativa que había llevado a la mayoría de los mercados hasta los niveles mínimos del ejercicio.
Los avances en el resto de Europa han resultado más desiguales, volviendo a destacar París con una subida del 7,25%. Londres ganó el 3,30% y Francfort perdía gas al final de la sesión al seguir la estela de Wall Street. La Bolsa alemana subía el 3,01% poco antes del cierre y en esos momentos el Dow Jones avanzaba sólo el 0,44%.
Los datos económicos conocidos ayer en Estados Unidos vuelven a mostrar la dificultad de conseguir una recuperación a corto plazo. El avance del índice de confianza de los consumidores para el mes de marzo cayó 4,5 puntos, hasta 75, al tiempo que la producción industrial tan sólo avanzaba el 0,1% en febrero.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 15 de marzo de 2003