"No tenemos otra salida más que manifestarnos en la calle, protestar y demostrar que estamos en contra", explicaba ayer Isabel Tobarro, una administrativa de 53 años, que junto a su marido y otros amigos y compañeros acudió a la plaza de toros de Alicante a manifestar su oposición a una posible intervención militar. "Estamos aquí porque queremos manifestarnos contra una guerra salvaje e inmoral", explicaba la manifestante. "Ante un gobierno que no dialoga y no utiliza los cauces habituales para negociar, nuestra única salida es salir a la calle".
Isabel cree que este tipo de actuaciones "sí que sirven, porque aunque se hagan el sordo y digan desde las instituciones que apenas han tenido incidencia las manifestaciones, estos actos llegan a la población, y la gente al final se da cuenta que algo no funciona en este país".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 16 de marzo de 2003