Las líneas generales por las que avanzarán los textos estatutarios que propugnan CiU y PSC parten de un elemento común y otro divergente. El primero es que nadie quiere irse de una España plural. El segundo es que mientras para la federación nacionalista es indiferente quien sea el inquilino de La Moncloa, los socialistas catalanes vinculan el buen fin de su plan a la victoria en las urnas de José Luis Rodríguez Zapatero. CiU, en palabras del candidato a la presidencia de la Generalitat, Artur Mas, está dispuesta a entrar en el Gobierno de España a cambio de que se apruebe su propuesta de estatuto.
- Representación internacional. Tanto PSC como CiU quieren que Cataluña tenga presencia en las instituciones de la Unión Europea.
- Reforma del Senado. Para el PSC es prioritaria la reforma constitucional que convierta el Senado en una auténtica Cámara territorial.
- Financiación. CiU propone para Cataluña un sistema de financiación basado en el modelo vasco de concierto entre el Estado y la comunidad autónoma. El nuevo sistema incluye la fijación de un cupo catalán y el control o gestión conjunta de la Agencia Tributaria. Se trata de abandonar el régimen general de financiación de las comunidades autónomas. El PSC, en cambio , propone profundizar en la corresponsabilidad fiscal para todas las comunidades. Considera necesario aumentar la participación en los impuestos y que la recaudación esté ligada a los tributos realmente pagados por los ciudadanos catalanes. También exige implantar mecanismos de nivelación para que los Gobiernos autónomos puedan prestar un nivel similar de servicios a los ciudadanos si realizan un esfuerzo fiscal similar. Aunque no es una cuestión estrictamente de financiación, los socialistas consideran que también es fundamental que las comunidades dispongan de los recursos necesarios para infraestructuras.
- Administración única. CiU propugna que la Generalitat se convierta en la única Administración existente en Cataluña. Que la Generalitat cuente con todas las competencias, a excepción de Defensa y control de fronteras. Los socialistas matizan esta propuesta, aunque propugnen un techo similar.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 16 de marzo de 2003