Corea del Sur puso ayer en alerta a su Ejército en previsión de que Corea del Norte aproveche que la atención del mundo está centrada en Oriente Próximo para efectuar algún movimiento hostil. El Gobierno de Seúl, que apoya la intervención de Washington contra Irak, sigue con preocupación el conflicto que enfrenta a Estados Unidos con Corea del Norte por el programa nuclear del régimen de Kim Jong Il.
Ese enfrentamiento comenzó a subir de tono en octubre pasado, cuando el Gobierno de George W. Bush anunció que el régimen de Kim había reconocido tener un programa nuclear secreto, en contra de lo pactado en 1994.
Los expertos temen que Corea del Norte utilice las aguas revueltas para forzar a Washington a entablar negociaciones bilaterales sobre su programa atómico y lograr la firma de un tratado de no agresión.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 21 de marzo de 2003