El concejal de Urbanismo, Ignacio del Río, afirmó ayer que el avance del Plan Especial para la Remodelación del eje Recoletos-Prado -elaborado por el equipo de Álvaro Siza y Juan Miguel Hernández de León ganador del concurso de ideas convocado por el Consistorio- es "una propuesta de los arquitectos, que aún no se ha tramitado ante el pleno del Ayuntamiento de Madrid".
"En todo caso, el Ayuntamiento de Madrid, para garantizar la gestión del Plan Especial, aplicará sus principios de política urbanística, que pasan por alcanzar acuerdos con instituciones y vecinos afectados" (véase EL PAÍS de ayer).
Ignacio del Río descartó que el Ayuntamiento de Madrid propicie situaciones de presión o que puedan generar incertidumbre a los vecinos. "Todas las actuaciones municipales se rigen por el principio de interés general, pero eso no excluye el máximo respeto a los intereses de los vecinos del barrio", aseguró el máximo responsable municipal de Urbanismo, quien recordó que las fases de avance de los proyectos urbanísticos sirven para establecer diálogo y para dilucidar qué acciones son gestionables y cuáles deben aplazarse hasta garantizar los acuerdos necesarios".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 22 de marzo de 2003