Un guardia civil y un divorciado padre de dos hijos se inscribieron ayer en el registro de parejas de hecho de la Junta de Andalucía, en Málaga. La unión se selló con la simulación de una boda civil entre José Luis G. E., de 35 años, y Fernando D. P., de 39, respectivamente; una ceremonia que se convirtió en una reivindicación de los derechos del colectivo gay. Para José Luis la decisión no ha sido fácil: "En todos los trabajos hay cuestas arriba y aquí estoy, en una cuesta arriba". No adelantó si solicitará vivir con su pareja en una casa cuartel. El Colectivo de Gays y Lesbianas consideró la unión como "una oportunidad para que la Guardia Civil se siga democratizando".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 23 de marzo de 2003