Unos cincuenta vecinos de los municipios afectados por el trazado de la autopista de peaje entre Las Pedrizas (Antequera) y Málaga se concentraron ayer frente a la delegación del Ministerio de Fomento en esta ciudad para expresar su rechazo al proyecto por su impacto medio ambiental, económico e hidrológico.
La plataforma que aglutina la oposición a la carretera sostiene que afectará al parque natural de los Montes de Málaga, estrangulará el pueblo de Casabermeja y dificultará el incipiente desarrollo socioeconómico de la zona basado en sus valores naturales. "Van a expropiar un patrimonio natural desde Madrid para beneficio de una empresa privada", protestó Marina Garzón, una afectada.
El proyecto comprende un tramo de 24 kilómetros entre Las Pedrizas y la barriada de Puerto de la Torre, al norte de la capital, que sería una alternativa rápida aunque de pago a la autovía Málaga-Antequera. La plataforma rechaza el proyecto porque argumenta que "machacará" el paraje natural de Casabermeja, Almogía, Antequera y Málaga. Además, la organización cree que ese tramo de autopista no obedece a las necesidades de los ciudadanos, sino a la especulación urbanística de la Costa del Sol y que supondrá "un gran negocio para las grandes empresas constructoras".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 26 de marzo de 2003