Desde el Gobierno se muestran muy preocupados por la baja natalidad, pero esta preocupación es de boquilla, pues ni siquiera son capaces de dar asistencia médica (lo que es un derecho básico). Así, yo me hallo en situación de abandono médico en el tercer trimestre de gestación, debido a la amortización de la plaza de mi tocólogo, pues desde el 12 febrero llevo solicitando cita y, cuando por fin consigo que me den alguna, es para el 29 de abril y salgo de cuentas el 3 de mayo, por lo que me temo que a esas alturas ya estaré de parto. ¿Debo confiar en la providencia para no tener ningún problema en este trimestre? ¿Cómo puedo saber si todo va correctamente? ¿Acaso quieren que acuda a la sanidad privada? ¿Es así como piensan fomentar la natalidad?
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 28 de marzo de 2003