Los abogados de una familia del Polígono Norte de Sevilla, a la que la Junta pretende retirar 9 niños, de entre nueve meses y 15 años, aceptaron ayer que los menores sean declararon en "riesgo" en lugar de "desamparo", mientras que el delegado de Asuntos Sociales prometió que la Policía no acudirá a retirarlos si van al colegio. El abogado de la familia, José Antonio Bosch, explicó que la madre Francisca M.L. mantuvo ayer una reunión con el delegado de Asuntos Sociales, Francisco Obregón, y ambas partes acordaron rebajar la tensión y buscar soluciones el próximo lunes.
Según Bosch, los letrados de la familia propusieron a la Junta que los niños sean declarados en situación de "riesgo" en lugar de "desamparo", lo que según la Ley de Protección al Menor implica que el tratamiento debe llevarse a cabo en el seno de la familia. Para ello, propusieron la firma de un convenio, con intervención de las ONG que trabajan en el Polígono Norte, para "tratar las disfunciones de la familia y solucionarlas".
Por su parte, Obregón reclamó como condición que los nueve hermanos y primos sean escolarizados, ya que desde hace un mes y medio permanecen escondidos entre familiares y amigos para evitar que la Junta ejecute la orden de internarlos en centros de acogida, y "se comprometió personalmente ante la madre que la Policía no acudirá a la barriada en busca de los menores", según Bosch. El letrado indicó que todas las partes coincidieron en que "para el desarrollo integral de los menores el sitio ideal es el seno de la familia biológica, que es la que mejor garantiza sus necesidades".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 29 de marzo de 2003