Un tribunal de Berlín decidió embargar las cuentas bancarias que la Embajada argentina en Alemania posee en este país, tras haber aceptado una sentencia emitida por un juez de Francfort, la semana pasada, que concede a dos ahorradores alemanes el "legítimo derecho" a reclamar en ese país una deuda de 750.000 euros que Argentina mantiene con cada uno de ellos y que está pendiente de pago desde diciembre de 2001.
El embargo ha inmovilizado 1,5 millones de euros que Argentina tiene repartidos entre dos cuentas del Deutsche Bank (sucursales de Berlín y Francfort) y una cuenta del Dresdner Bank (sucursal de Hamburgo). Según admitieron dos fuentes con acceso al expediente, en esas cuentas está depositado el dinero que el país obtuvo con la venta de la antigua Embajada en Bonn (unos 900.000 euros) y el efectivo para pagar las nóminas de los funcionarios que trabajan en la Embajada en Berlín y en las legaciones consulares de Francfort y Hamburgo, quienes no podrán cobrar sus salarios a menos que se establezca otra vía de pago.
Fuentes argentinas señalaron que esta decisión sienta un precedente "preocupante", ya que ese dinero tiene "carácter diplomático" y está protegido por la Convención de Viena, por lo que se lo considera "inembargable". La cancillería argentina envió una nota telegráfica al resto de sus legaciones europeas, en la que les prevenía del riesgo de medidas similares, y ha confiado la defensa de sus intereses a un bufete de abogados de Francfort. La onda expansiva se ha hecho sentir en Buenos Aires: sólo en Alemania hay 250.000 ahorradores que poseen bonos argentinos impagados por la friolera de 7.000 millones, y ahora pueden pretender la misma solución judicial.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 29 de marzo de 2003