Mujeres en Red ha iniciado una campaña para protestar por la decisión de la Iglesia nicaragüense de excomulgar a los padres de Rosa, la niña de 9 años que, tras ser violada, quedó embarazada, y a la que se le practicó el aborto. La Red, con buen criterio, invita a enviar a la Iglesia nicaragüense y al Vaticano una lista de las personas que han colaborado en hacer posible la interrupción del embarazo de Rosa, para que se incluyan también en el expediente de excomunión.
Pero esta iniciativa debería ser el inicio de una campaña más amplia en la que habría que incluir, para empezar, al violador de Rosa, pero también a: políticos católicos corruptos, curas pederastas, sacerdotes violadores, violadores católicos en general, sacerdotes que obligan a las monjas a abortar, hombres y mujeres católicos que usan anticonceptivos, esposos católicos que asesinan a sus esposas, terroristas católicos, mujeres y hombres católicos que se divorcian, etc. Así, la Iglesia quedaría limpia como la patena y sabríamos con cuántos efectivos cuenta en realidad.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 29 de marzo de 2003