Don Julio Carabaña, catedrático de Sociología de la Complutense, planteaba el viernes 28 en las páginas de opinión de EL PAÍS que ha leído o escuchado muchas razones legales y políticas en contra de la guerra de Irak, pero ninguna moral. Le doy una, por si le sirve: el fin no justifica los medios. Confío en que la tesis del doctor Carabaña de que la invasión encaja moralmente en la doctrina de la injerencia humanitaria sea un sarcasmo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 31 de marzo de 2003