Monseñor Manuel Eguiguren, obispo auxiliar de la ciudad boliviana de Beni (izquierda), recibió ayer de manos del lehendakari Ibarretxe el premio que le reconoce como Mejor Cooperante vasco de 2002. Eguiguren, quien se definió como "un indígena" más, aseguró que la teología que se aplica en Latinoamérica "nada tiene que ver" con la de Europa.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 3 de abril de 2003