La sala de exposiciones del Archivo del Territorio Histórico de Álava (Miguel de Unamuno, 1) está abierta a todos los campos de la fotografía. Después de una serie de exposiciones dedicadas a la investigación en este terreno artístico, ahora se presenta, hasta el 10 de mayo, el trabajo costumbrista de Miguel Lecuona (Irún, 1941).
La labor de este veterano de la cámara mantiene la afición por el blanco y negro y el gusto por el retrato de personajes peculiares. Esta pasión por la singularidad del ser humano llega al autorretrato, en la fotografía La tenaza, donde el protagonista aparece desnudo, desprotegido, agachado, en posición de alerta ante la cámara fotográfica. Disposición que, por cierto, no mantienen el resto de los personajes retratados, desde esa amable anciana farmacéutica de Resende (Portugal), hasta el aitona de Etxalar (txapela, camisa de cuadros, apoyado en la makila).
Lecuona también gusta de retratar personajes inexistentes, imaginaciones fotográficas y misteriosas de ambiente urbano (El efecto avestruz, Sueños de belleza) o paisajes marineros o de montaña.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 13 de abril de 2003