Un juez del condado de Madison (Illinois) redujo ayer a la mitad los 12.000 millones de dólares de fianza exigidos a la tabacalera Philip Morris (fabricante de la popular marca Marlboro) para apelar una sentencia que condena a la empresa tabacalera a pagar 10.100 millones de dólares. La tabacalera ha sido demandada por cuatro fumadores (en nombre de todos los demás usuarios de la marca) que consideran que Philip Morris engañó a los consumidores al indicar en las cajetillas que los cigarrillos bajos en nicotina eran menos dañinos que los normales. Los fumadores aseguran que estos cigarrillos son incluso peores que los normales. La tabacalera alegó que la etiqueta light sólo se refiere al sabor.
El juez Nicholas Byron pidió ayer que Philip Morris deposite 6.000 millones como garantía antes de comenzar la apelación. En un comunicado, la empresa manifestó que el fallo ofrece una "solución onerosa pero viable para este asunto". Philip Morris había aducido que la fianza original de 12.000 millones causaría su bancarrota. El abogado de los demandantes, Stephen Tillery, anunció ayer que apelará el fallo porque los 6.000 millones son "una cantidad inferior a lo que verdaderamente Philip Morris puede pagar".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 16 de abril de 2003