Gracias a una gestión sin sobresaltos en los momentos de alegrías inversoras en los mercados, la compañía española de tecnologías de la información asegura que se encuentra en una buena posición para salir reforzada de la crisis actual. Además, sigue acaparando contratos de controles electorales, el último en el Reino Unido, o de billetaje en transportes públicos, como el Metro de París. A pesar de lo que está cayendo, este año espera crecer también con dos dígitos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 20 de abril de 2003