La retirada de última hora de las instituciones españolas en el festival La Huella de España, que se celebra desde el próximo domingo hasta el 4 de mayo en La Habana, marcará la edición de este año. La bailarina cubana Alicia Alonso declaró ayer en una rueda de prensa que no entiende la ausencia de las instituciones españolas que hasta ahora habían apoyado la realización del festival. "Yo no lo entiendo y he querido pensar que están teniendo muchos gastos igual que otros países con la guerra", dijo Alonso, presidenta de honor y directora general del festival. "Creo que aunque tengan gastos, muchos gastos de guerra por fuera no se pueden quitar las ayudas", y dijo que para asumir esa actitud "tendrán alguna razón, pero nosotros tenemos las nuestras y seguiremos hacia adelante". La artista afirmó: "Para nosotros las huellas no se llevan por fuera, se llevan por dentro, tenemos una gran tradición y una gran riqueza interior y la seguiremos llevando".
Alicia Alonso forma parte del grupo de 27 intelectuales y artistas que firmaron el Mensaje desde La Habana para amigos que están lejos, en el que plantean que Cuba está hoy "más amenazada que nunca" por Estados Unidos y que "para defenderse, se ha visto obligada a tomar medidas enérgicas que naturalmente no deseaba".
El programa de La Huella de España incluye 19 espectáculos en los que intervendrán artistas cubanos de teatro y danza y varios grupos de bailes de la Federación de Sociedades Españolas de la isla. Los organizadores anunciaron dos exposiciones, de Joaquín Sorolla y Paisajes imaginarios, de la pintora catalana residente en la isla Cristina Fonollosa. También un ciclo de cine español en el que serán exhibidas las películas Belle époque, de Fernando Trueba; Celos, de Vicente Aranda; El efecto mariposa, de Fernando Colomo, y La camarera del Titanic, de Bigas Luna, entre otras.
Cabrera Infante
Por otra parte, el escritor cubano Guillermo Cabrera Infante declaró ayer a Onda Cero, según recoge Europa Press, que el manifiesto de los intelectuales lo podría haber redactado el propio Gobierno, ya que "los que han firmado son funcionarios del Estado y en Cuba no hay propiedad privada ni vidas privadas". Cabrera Infante declaró que la preocupación mostrada por el régimen de Fidel Castro ante el actual panorama mundial es "la constatación" de que Gobiernos "tiránicos" como el de Cuba "no podrán hacer lo que les dé la gana porque están en el punto de mira de Estados Unidos".
"La preocupación es una forma de paranoia y, por otra parte, la constatación de que no es posible que los Gobiernos tiránicos de Cuba o Corea del Norte hagan lo que les dé la gana porque están en el punto de mira de Estados Unidos", dijo Cabrera, para quien el hecho de que el régimen alega sentirse "amenazado por Estados Unidos", es tan sólo un pretexto "para cometer toda clase de fechorías fuera de la ley".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 22 de abril de 2003