Ajenos a quienes les piden moderación y diplomacia, los halcones del Gobierno de EE UU se reunieron ayer en la Casa Blanca con un objetivo: buscar la manera de castigar a Francia. George W. Bush y especialmente el vicepresidente, Dick Cheney, no están dispuestos a olvidar el enfrentamiento entre Washington y París en las semanas previas a la guerra.
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La cumbre anti francesa de la Casa Blanca, impulsada por Cheney con el beneplácito de Bush aunque sin su presencia, estaba convocada para la semana pasada pero acabó celebrándose el lunes. Bush quiere un escarmiento inmediato, sin esperar a que el tiempo diluya el enfrentamiento. Según fuentes diplomáticas, Bush podía elegir entre una separación amistosa o un divorcio desagradable, y ha optado por lo segundo.
Como primera medida, quiere eclipsar a Francia en los organismos internacionales. La primera maniobra de bloqueo puede imponerse en la OTAN, con un hábil mecanismo burocrático que puede marginar a Francia. EE UU puede impulsar que el Comité de Planificación de Defensa de la Alianza se convierta en el organismo de gobierno de la institución, lo que restaría poder al Consejo del Atlántico Norte del que dependen las grandes decisiones. Francia, que es un peso pesado en el Consejo, no tiene representación en el Comité, del que se retiró en 1966.
Fuentes estadounidenses aseguran que hay más resquemor contra Francia por el bloqueo en la OTAN cuando se debatió el apoyo a Turquía que por la actitud de ese país en el Consejo de Seguridad de la ONU, donde se negó a aceptar lo que el ministro francés, Dominique de Villepin, definía como "la lógica de la guerra".
En la reunión de la Casa Blanca estuvieron algunos de los políticos más conservadores, incluidos los segundos escalones en el Pentágono y en el Departamento de Estado, Paul Wolfowitz y Richard Armitage. Entre las propuestas también se habla de vetar o ignorar a Francia en los encuentros políticos y económicos de los próximos años. Fuentes de la Casa Blanca insisten en que ese país "debe pagar un precio" por haberles plantado cara.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 23 de abril de 2003