En estos días previos a las elecciones municipales, los vecinos de Vallecas vemos con asombro y alegría cómo la avenida de La Albufera se ha llenado de bancos nuevecitos y relucientes.
¡Que felicidad! ¡Por fin podremos sentarnos como personas, sin tener que recurrir al suelo o a los escalones de las tiendas!
Pero hay una sombra en nuestra alegría. Poco antes de los anteriores comicios que ganara el señor Álvarez del Manzano, también la calle se llenó de bancos, que luego fueron desapareciendo poco a poco tras las elecciones. Lo que se hace con ellos nos es desconocido.
Por eso, ahora que los bancos han aflorado de nuevo, los vecinos de Vallecas pedimos a gritos a los nuevos munícipes: "¡Por favor! ¡Déjennos los bancos! ¡No nos los quiten otra vez!
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 25 de abril de 2003