Porsche ha superado con éxito un reto que parecía casi imposible: hacer un todoterreno con el carácter y eficacia de un superdeportivo y los recursos de los mejores 4×4 fuera del asfalto. El Cayenne ofrece todo lo que se espera de un auténtico Porsche: prestaciones de vértigo (hasta 266 km/h.), tacto deportivo y un comportamiento impecable, tanto en carretera como en el campo. Y con una carrocería amplia y bien dotada para el uso familiar. Cuesta caro, pero es el mejor.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 26 de abril de 2003