Las carreras de promoción impulsadas por el circuito Ricardo Tormo de Cheste arrancaron ayer en el trazado valenciano con la participación de decenas de niños y niñas, que, jaleados por sus padres, ofrecieron un espectáculo entretenido. Hay chavales a los que, subidos en la motocicleta, no les llegan los pies al suelo; otros, apenas lo tocan con las puntas. Y algunos todavía no tienen fuerza para sujetar la moto. Eso sí, una vez encima, van como tiros. En la foto aparece un grupo de participantes de la categoría de minimotos, críos de ocho y nueve años que aspiran algún día a ser campeones.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 28 de abril de 2003