La buena educación y el saber comportarse con los demás, es muy importante adquirirlo en los primeros años de vida. En este aprendizaje es muy importante que se enseñe, entre otras cosas, a saber perder y a saber ganar, y a inculcar a los niños algo de sentido común, como es el hecho de que siempre no se puede tener razón y que hay que respetar a los demás, y no abusar de los más pequeños.
El riesgo que se corre, sino se presta atención a estas cosas, es que tengamos el día de mañana adultos acomplejados, peligrosos y muy resentidos, que pueden llegar a ser, a pesar de la mayoría del pueblo, presidentes de gobiernos democráticos.
Algunos de estos personajes, mienten cínicamente, diciendo que hablan en nombre de la comunidad internacional (como ETA lo hace por aquí con Euskal Herria), cuando bien saben ellos que están solos y que no tienen más que el respaldo vergonzante de sus propios gobiernos, pero como han crecido como unos seres consentidos, se piensan que el mundo es suyo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 28 de abril de 2003