Tres personas resultaron muertas y al menos setenta heridas, siete de ellas de gravedad, como consecuencia de un atentado suicida perpetrado anoche en un bar de Tel Aviv. El atentado tuvo lugar pasada la una de la madrugada, hora local (medianoche, hora peninsular española), pocas horas después de que el Parlamento palestino reunido en Ramala aprobara por amplia mayoría el nuevo Gobierno de Abu Mazen. Los diputados sancionaron favorablemente la lucha contra el "caos armado", propugnaron el fin de la Intifada y reclamaron el desarme de los grupos radicales.
El atentado se produjo en la entrada de un conocido establecimiento nocturno, Mike's Place, situado en la calle de Herbert Samuel, que discurre frente a la playa de Tel Aviv, muy cerca de la embajada de Estados Unidos y en cuyos alrededores se encuentran otros establecimientos nocturnos.
El atentado suicida tuvo lugar al entrada del establecimiento, mientras los guardas de seguridad del Mike's Place trataban de identificar a un hombre, vestido con un largo abrigo, que les había infundido sospechas y al que habían conseguido reducir por la fuerza y mantenían estirado en el suelo, intentado cachearlo. En ese momento de confusión el suicida logró accionar su dispositivo, provocando la explosión del artefacto y ocasionando la muerte de al menos dos guardias de seguridad. Una tercera víctima falleció mientras la trasladaban a un hospital cercano.
La carga explosiva proyectó numerosas tuercas y tornillos que hirieron a los clientes que se encontraban en el interior del establecimiento, ocasionando al mismo tiempo un incendio que prendió en la ropa de varias personas, según aseguraron ayer por la radio testigos presenciales, fuentes de la policía y de los equipos de rescate.
"He salvado la vida. Estoy vivo, pero una de mis camareras se encuentra malherida y ha perdido el brazo", aseguraba a la entrada del local Gal Ganzman el propietario del establecimiento, con el jersey y el rostro cubierto de sangre, mientras trataba de aguantar las lágrimas.
"Vimos a varios jóvenes quemados saliendo del bar. Estábamos en una sala de fiestas cercana, esperando a un amigo en la puerta y entonces, a diez metros de aquí, vimos salir fuego del bar, gente quemada huyendo", declaró un testigo a la radio israelí. La fachada del bar quedó totalmente destrozada, aunque el cartel Mike's Place-Blues by the sea, permanecía intacto.
"La prioridad absoluta del Gabinete palestino debe ser frenar el terrorismo y poner fin a este tipo de atentados", declaró un alto cargo del Gobierno israelí a la agencia France Presse.
Éste es el segundo atentado suicida que se produce en la zona de Tel Aviv en poco menos de una semana. El anterior tuvo lugar en la estación del tren de Kfar Sava el pasado jueves y fue reivindicado por las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa, milicia radical vinculada al partido gubernamental Al Fatah.Aquel atentado, que se saldó con dos muertos, se produjo también en un momento delicado y simbólico del proceso de reformas palestino, después de que el primer ministro Abu Mazen y el presidente Yasir Arafat consiguieran limar con un pacto histórica sus diferencias con respecto al Gobierno. La nueva Autoridad Nacional Palestina (ANP) condenó está madrugada el atentado suicida.
Condena de la Casa Blanca
La Casa Blanca también expresó su condena y aseguró que el atentado no impedirá la puesta en marcha de su plan de paz para Oriente Próximo, conocido como Hoja de Ruta. "Condenamos este acto cobarde de terrorismo. Estos homicidas no sólo intentan matar a civiles inocentes, sino que intentan matar las aspiraciones del pueblo palestino de tener un Estado propio libre, democrático y próspero", afirmó el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Sean McCormack. El presidente George W. Bush, dijo el portavoz, anunciará próximamente el contenido de la Hoja de Ruta, que prevé la creación de un Estado palestino en 2005.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 30 de abril de 2003