El consejero de Sanidad, Serafín Castellano, afirmó ayer que la Generalitat está realizando 181 auditorías en las empresas de Alcoi y Cocentaina que tienen instalaciones "de riesgo" con el objetivo de conseguir la erradicación de futuros brotes de neumonía por legionela. Unas auditorías, financiadas por el Consell, y de las que se informa a los empresarios para que adecuen sus instalaciones.
Por su parte, la secretaria de Sanidad del PSPV-PSOE, Encarna Llinares, acusó ayer al consejero de Sanidad de "ocultismo" en relación al último brote de neumonía por legionela en Alcoi, y pidió que se revise el protocolo de actuación vigente para evitar el contagio.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 3 de mayo de 2003