Los sindicatos STEE-EILAS, ELA y LAB exigieron ayer al Parlamento vasco y a la ararteko que adopten medidas para que los presos "políticos y sociales" puedan seguir estudiando en la UPV. El Gobierno central ha promovido una reforma legal para que sólo puedan hacerlo en los dos centros acreditados por Instituciones Penitenciarias. Las centrales también piden a la UPV y a Educación que pongan los medios para dar clase a encarcelados, y han convocado protestas contra esta "restricción del derecho a estudiar", el miércoles en los campus de la UPV.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 12 de mayo de 2003