La agresión sufrida por tres inmigrantes en Huelva el día 17 de abril, a consecuencia de la cual murió uno de ellos, es un acto que atenta contra el derecho a la vida y a la igualdad recogidos en nuestra Constitución. Es radicalmente antidemocrático no respetar los derechos y libertades de todas las personas, con independencia de su religión, cultura, sexo, raza o cualquier otra diferencia.
Consideramos intolerable que unos individuos atenten contra la integridad física y psíquica de inmigrantes que llegan a España con la ilusión de mejorar su calidad de vida por medio de un trabajo digno.
Este suceso es un dramático ejemplo de la intolerancia racial que se está arraigando cada vez más en nuestra sociedad, olvidando tan pronto que los españoles también hemos sido emigrantes.
Por todo ello, los alumnos de Educación Secundaria de Adultos del IES Padre José Mirabent, de Isla Cristina, rechazamos y denunciamos este tipo de sucesos, impropios de una sociedad civilizada, con el deseo de que nunca se repitan.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 13 de mayo de 2003