Fue el momento más emotivo de la ceremonia. Álvaro Bellas Dublang, el alumno número 40 de la promoción, pidió recoger personalmente el diploma en el estrado pese a sus dificultades para caminar, que le obligan a utilizar muletas. Aunque la altura de los escalones era considerable, lo consiguió, y todo el auditorio se levantó para ovacionarlo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 13 de mayo de 2003