Es ésta de esas ocasiones en que lamento que mi voz, la de un ciudadano, no tenga las "tribunas" que quiere el concejal Torres, del PP, en Alcorcón, para que se me oiga o lea con el mismo ámbito y capacidad de difusión.
Me ha resultado indignante la "perorata" que, escrita por este individuo, aparece en un periódico de la zona de carácter panfletario al servicio del Partido Popular, lo que no se le escapa a nadie (encima pagado con nuestros impuestos).
Al margen de las consideraciones que en su discurso impregnado de tufo a chapapote, soberbia, servilismo a Estados Unidos, voy a centrarme ahora en lo que a Alcorcón se refiere, y en concreto a su "denuncia" de un supuesto show estructurado por la izquierda alcorconera.
Falta usted a la verdad, señor Torres, al decir que la oposición abandona sus escaños entre gritos e insultos (que los merecerían, usted y su grupo político), gritos sí los hubo, y eran gritos indignados con razón, y esta parte de la verdad usted la omite, provocados por el comportamiento, juzgado y sentenciado por anticonstitucional de su alcalde y de usted, vergonzante cómplice de tan antidemocrática actitud.
En lo personal le aseguro que, amén de "limpito" y "bien hablado", galante a menudo, jamás nadie ha considerado que sea yo impresentable y desde luego no le admito a usted calificarme cobardemente, desde su posición y tribuna.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 14 de mayo de 2003