Manuel Peinado (Granada, 1953) reside en Alcalá desde hace un cuarto de siglo. Es catedrático de Biología Vegetal y un hombre vinculado al mundo académico, que presume de tener unas excelentes relaciones con el rector de la Universidad. En cambio, sus relaciones con el obispo son peores. "Y lo serán mientras siga pidiéndonos a los alcalaínos espacios que son nuestros", dice en relación a la exigencia de la diócesis de que el Consistorio le entregue la Capilla del Oidor, el centro cultural más apreciado de la ciudad, para convertirlo en una iglesia.
Más cultura y mejor medio ambiente son dos de los pilares de su programa. Quiere convertir el cuarto centenario de la publicación de El Quijote, en 2005, en el "despegue de Alcalá en todo el mundo". En materia ambiental, promete una nueva planta que "elaborará el combustible de los transportes públicos con un diésel ecológico obtenido de los aceites domésticos y de la restauración".
Defiende su gestión económica: "Cogimos el Ayuntamiento con un presupuesto de 92 millones de presupuesto y una deuda de 102. Ahora el presupuesto es de 138 y la deuda de 84". Pese a este control en el gasto, promete construir "la tercera ciudad deportiva de Alcalá en Espartales", de 170.000 metros cuadrados.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 14 de mayo de 2003