Los resultados del primer trimestre que ha presentado Iberia arrojan unas pérdidas de 22,4 millones de euros, confirmando con ello las peores previsiones. La guerra en Irak y la debilidad de la economía son dos de las razones que explican la caída de los resultados de Iberia, junto con el encarecimiento del carburante y la tardía celebración de la Semana Santa, que ha trasladado el incremento de la actividad propio de esas fechas al mes de abril. La cotización de Iberia apenas se ha hecho eco de esas cifras, con una mínima variación a la baja del 0,63% en el precio de los títulos, que se mantienen en 1,57 euros, más cerca de los máximos anuales -1,68 euros a primeros de mayo- que de los mínimos -1,13 euros a mediados de marzo-, al estar básicamente descontado que la guerra contra Irak provocaría un nuevo retroceso en la demanda. Las acciones de Iberia acumulan una ganancia del 12,14% en el ejercicio al mantener la compañía expectativas de mejorar sus datos a medio plazo. El tráfico de pasajeros aumentó el 0,5% en abril a pesar de la reducción del 3,5% en la oferta, lo que ha mejorado el coeficiente de ocupación del pasaje tanto en vuelos domésticos como internacionales.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 18 de mayo de 2003