Alberto Ruiz-Gallardón y las más de 30 personas -entre políticos y periodistas- que acompañan al candidato del PP durante la campaña recorrieron ayer, en superficie y bajo tierra, la "ruta cultural" con la que pretende incluir a Madrid entre las "grandes ciudades del saber". Primero, en un autobús turístico, el eje Prado-Recoletos; después, los locales de ensayo gratuitos de la estación de Metro de Usera. Y desde allí, en el subterráneo, hasta Legazpi, al encuentro con el viejo matadero de Arganzuela.
La visita a los cinco locales de ensayo abiertos por la Comunidad en la estación de Usera -donde grupos musicales pueden ensayar y grabar sus maquetas de forma gratuita- le sirvió a Ruiz-Gallardón, declarado melómano, para conocer de primera mano a dos grupos desconocidos pero con "futuro": los españoles Orgasmical y los argentinos Einstein; los segundos, sorprendidos por la comitiva en pleno ensayo, dedicaron al candidato unos compases y le regalaron, con una sonrisa, su disco Eterno retorno.
Ya en Legazpi, pero sin salir aún a la superficie, el cabeza de lista presentó apresuradamente otro de sus proyectos: el bibliometro, un servicio gratuito de préstamo de libros en el interior del suburbano que contará con un fondo de 700 títulos.
El lema del día era Aliméntate de cultura. Y el equipo electoral lo cumplió a rajatabla: al término del discurso de Ruiz-Gallardón, los asistentes dieron buena cuenta de la maqueta de una de las naves del matadero elaborada a base de dulces, pastas, fruta y ensaladas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 19 de mayo de 2003