El Juzgado de lo Penal número 2 de Vitoria acoge a partir de hoy un juicio en el que cuatro personas de nacionalidad colombiana están acusadas de introducir en España a trabajadores clandestinos procedentes de su país. La Fiscalía pide para cada uno de los inculpados tres años de prisión por facilitar la llegada irregular de 15 personas a la capital alavesa, a los que abandonaron sin documentación ni permisos, así como una multa de 2.500 euros.
El relato de los hechos de la Fiscalía detalla que los acusados remitieron en distintas fechas del año 2001 cartas de invitación a ciudadanos colombianos que deseaban emigrar a Europa en las que se comprometían a hacerse cargo de sus gastos de alojamiento y manutención durante su estancia en España. En las misivas les aseguraban que la cuarta persona acusada, una mujer de su misma nacionalidad, se ocuparía de conseguirles en Vitoria los permisos legales de trabajo y de residencia.
El escrito de la Fiscalía detalla que la quincena de súbditos colombianos realizaron viajaron siguiendo las directrices de los ahora inculpados. Todos habían abonado, según la acusación pública, el equivalente en pesos a cantidades de entre 900 y 1.200 euros a una hermana de una de las acusadas que dirige una agencia de viajes y que les había asegurado las condiciones del traslado antes referidas. Ya en España se encontraron "en grave estado de desamparo, sin dinero, trabajo ni legalización de su situación".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 19 de mayo de 2003