El Gobierno presentó ayer el borrador de reforma de la Ley de Extranjería, en el que recupera la práctica totalidad de las enmiendas que el Congreso rechazó en el último pleno de la anterior legislatura. Contra lo que se había anunciado, las modificaciones no se limitan a los puntos más controvertidos del texto, sino que suponen la reforma de 56 de los 63 artículos de la ley. El borrador, rechazado de forma tajante por el PSOE, tendrá que ser ahora negociado con las fuerzas políticas y el Gobierno pretende enviarlo al Congreso el próximo día 30. Entre otras medidas, contempla elevar a cinco años el tiempo que los inmigrantes deben aguardar hasta obtener la residencia permanente en España.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 25 de mayo de 2003