No hubo vuelco electoral. Y aunque se produjo un avance general del PSOE, el Partido Popular logró compensar la pérdida de la Comunidad de Madrid con una victoria que le permitirá gobernar las Islas Baleares. Las elecciones autonómicas celebradas ayer en 13 de las 17 comunidades autónomas han consolidado el mapa plural que abrieron los comicios anteriores, en junio de 1999. Según datos prácticamente definitivos, con el 99,42% de los votos escrutados, el PP, pese a ser el partido más votado, pierde por un solo escaño la crucial comunidad de Madrid, por un pacto entre el PSOE e Izquierda Unida (IU). A su vez, el PP ha recuperado Baleares al lograr la mayoría, con el apoyo del escaño de la Agrupación de Formentera, que no obtuvo hace cuatro años. El Gobierno de Navarra depende de las alianzas. Unión del Pueblo Navarro (UPN) no ha logrado la mayoría absoluta y un acuerdo de otros partidos en torno al PSOE podría desbancarlo.
El Gobierno de Navarra depende de los pactos entre partidos en torno al PSOE
Los populares reconquistan Baleares y los socialistas podrían recuperar Madrid
La izquierda consolida Aragón y el PP se atrinchera en la cornisa mediterránea
Los resultados refuerzan a líderes veteranos del PSOE como Bono e Ibarra
Así las cosas, el PP gobernaría en 6 de las 13 comunidades autónomas que se disputaron ayer. El PSOE lograría 5, al recuperar Madrid y perder Baleares. Queda la duda de Navarra. Coalición Canaria se mantendría al frente del Gobierno de las islas.
Cuatro comunidades no celebraron elecciones: Galicia, Andalucía, Cataluña y País Vasco. En dos de estas comunidades, Andalucía y Galicia, gobiernan los socialistas y populares, respectivamente. Cataluña está en manos de Convergència i Unió (CiU) y en el País Vasco gobierna una coalición entre el PNV, EA e Izquierda Unida.A la espera de que concluya el escrutinio, el mapa autonómico se distribuirá previsiblemente del siguiente modo: el PP gobernará siete autonomías. El PSOE lo hará en 6; Coalición Canaria, en 1; CiU en 1 y PNV-EA-IU en otra. Queda por decidir Navarra.
Las urnas y las alianzas posteriores dieron en 1999 al PP el Gobierno de 7 comunidades autónomas: Castilla y León, Cantabria, La Rioja, Navarra, Madrid, Murcia y Comunidad Valenciana (8 si se añade Galicia). Al PSOE, 5: Castilla-La Mancha, Aragón, Asturias, Extremadura y Baleares (6 si se añade Andalucía). Y a Coalición Canaria, 1.
Cambios de signo
Tras las votaciones de ayer, Madrid parecía cambiar de signo mediante el pacto entre el PSOE e IU. Y también lo hace Baleares, cuyo Ejecutivo pasará de una coalición dirigida por el PSOE a manos del ex ministro del PP Jaume Matas. Las restantes comunidades seguirían gobernadas por los partidos que hoy mandan en ellas. El PP, en Castilla y León, Cantabria, La Rioja, Murcia, Comunidad Valenciana (más Galicia).
Los Ejecutivos de Castilla-La Mancha, Aragón, Asturias y Extremadura (más Andalucía), a las que se sumará Madrid, continúan en manos de los socialistas, que pierden Baleares.
En las seis comunidades en las que el PP ganó ayer, lo hizo por mayoría absoluta. Pero en el caso del PSOE, proliferarán las alianzas. Así, en Aragón el PSOE necesitará el apoyo de la Chunta Aragonesista o del Par (Partido Aragonés) para lograr la mayoría absoluta que le permita seguir al frente del Gobierno.
En Madrid, el PSOE necesitará el apoyo de Izquierda Unida (IU) para disponer de la mayoría necesaria, ya que el PP ha sido el partido más votado. No obstante, al ser la Comunidad de Madrid un escaparate nacional, al candidato socialista, Rafael Simancas, le va a corresponder ejercer un importante liderazgo político. Simancas recuperaría el Gobierno que perdió Joaquín Leguina en las elecciones autonómicas de 1995. Por contra, Esperanza Aguirre, ex ministra de Educación y ex presidenta del Senado, sufre un varapalo en su carrera política.
Baleares ha cambiado de manos: del PSOE al PP. Los populares, con el apoyo de la Agrupación de Fuerteventura, recuperaron ayer la comunidad que perdió en 1999 por una amplia coalición que encabezó el socialista Francesc Antich. El PSOE subió ayer en votos y escaños, pero al perder sufragios los partidos nacionalistas y regionalistas que le apoyaron en 1999, el candidato del PP, el ex ministro de Medio Ambiente Jaume Matas logró recuperar el Gobierno. El resultado de Matas, que también ha cosechado un escaño más, fortalece su figura en el PP.
En Navarra, la situación es confusa. Todo depende de las alianzas. Unión del Pueblo Navarro (UPN) no logra la mayoría absoluta y el PSOE podría gobernar si consigue el apoyo de IU, PNV-EA y Convergencia Democrática de Navarra (CDN), de Juan Cruz Alli, frente al actual presidente navarro, Miguel Sanz.
Presidentes reforzados
Estas elecciones también han contribuido a consolidar a algunos líderes autonómicos del PSOE. Entre los veteranos, cabe destacar los casos del presidente de la comunidad de Castilla-La Mancha, José Bono, y de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, que han revalidado su mayoría absoluta y han derrotado a nuevos y jóvenes candidatos del PP, Adolfo Suárez Illana y Carlos Floriano, respectivamente.
Vicente Álvarez Areces, presidente de Asturias, seguirá al frente del Ejecutivo, aunque necesitará ahora el apoyo de IU.
También ha salido reforzado al presidente de Aragón, Marcelino Iglesias, que, en contraste con los comicios anteriores de 1999, ha superado al PP en votos y escaños, y ha colocado al PSOE como primera fuerza en la región. Este resultado tiene mucho que ver con el rechazo socialista al Plan Hidrológico Nacional. Este mismo rechazo permite explicar, por contra, el mediocre resultado de los socialistas en la Comunidad Valenciana y en Murcia. A su vez, los comicios refuerzan a los actuales presidentes populares de ambas comunidades, José Luis Olivas y Ramón Luis Valcárcel. Los populares han consolidado también sus resultados en Castilla y León, Cantabria y La Rioja, con ligeras pérdidas de votos.
Con estos resultados, los socialistas controlan el sur de España y una franja del centro y norte de la Península, que va de Madrid a Aragón, además del islote de Asturias.
Los populares se atrincheran en la costa mediterránea, en Castilla y León, y en Galicia, Cantabria y La Rioja.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 26 de mayo de 2003