Las elecciones municipales en Andalucía no depararon grandes cambios políticos. El Partido Popular conservó sus mayorías absolutas en Cádiz, Málaga y Huelva y recuperó la alcaldía de Granada donde obtuvo 14 concejales, más que todos los de los partidos de izquierda, y recuperó la mayoría que perdió en 1999. IU ganó en Córdoba; las listas socialistas fueron las más votadas en en Sevilla y Jerez.
Los datos de Interior indicaron desde el primer momento un nuevo triunfo de los alcaldes del PP en Cádiz -Teófila Martínez mantuvo sus 18 concejales frente a los 8 del PSOE; en Málaga -Francisco de la Torre sacó 17 ediles frente a 12 el PSOE y 2 de IU-; y en Huelva, donde Pedro Rodríguez obtuvo 16 concejales, frente a 10 del Partido Socialista y uno de IU.
Los socialistas fueron la fuerza más votada en Sevilla y conservaron la alcaldía, aunque precisarán de un pacto con el Partido Andalucista o con Izquierda Unida. El PSOE obtuvo 14 concejales; el PP, 12; el PA 4; e IU, 3.
En Córdoba, Rosa Aguilar, que ha desarrollado una campaña muy personalista en la que las siglas de IU apenas han tenido protagonismo, consiguió 13 concejales, frente a 12 del PP y cuatro del PSOE.
En Almería, la irrupción de una candidatura independiente encabezada por el ex alcalde popular Juan Megino -cinco concejales- dejó en sus manos la formación del gobierno local. En esta capital, que gobierna el PSOE con apoyo de IU, el candidato socialista se quedó a un concejal del PP, mientras IU sacó sólo un edil.
En Jaén, donde el PSOE tenía esperanzas de que el PP perdiera la mayoría absoluta, la lista popular mantuvo los 14 concejales que tenía, con los que se garantiza un nuevo mandato de mayoría absoluta.
El secretario general de los socialistas andaluces y presidente de la Junta, Manuel Chaves, destacó que una vez más había logrado ser la fuerza política más votada en la comunidad. El PSOE obtuvo el 38,17% de los votos, frente al 30,87% del PP. El secretario de Organización socialista, Luis Pizarro, eludió pronunciarse sobre los datos de las capitales, donde el PP consolidaba sus posiciones de 1999, pese al crecimiento del voto socialista. Prudencia es la que también mantuvo el Partido Popular, cuyo secretario general, Antonio Sanz, mostró "su satisfacción moderada" por los primeros datos. El PP se marcó como objetivo ser la primera fuerza en las ocho capitales.
En Izquierda Unida, desde que se conocieron los primeros datos de las empresas demoscópicas, incluso antes de que salieran los datos del Interior, se instaló un clima de euforia. La federación veía confirmado el ascenso de Rosa Aguilar y el número de concejales en las capitales. Las previsiones de IU, antes de la guerra de Irak, no eran nada optimistas.
Por el contrario, el Partido Andalucista, que mantiene un pacto de gobierno con el PSOE en Sevilla, las perspectivas de los primeros datos no eran nada halagüeños y, además de perder dos concejales en la capital de Andalucía, se quedó sin representantes en Cádiz y Granada. El gran batacazo lo registró en Algeciras, una de sus ciudades más emblemáticas, donde perdió la mitad de sus apoyos. Su alcalde, Patricio González, llegó a anunciar su dimisión, aunque rectificó una hora más tarde.
El Grupo Independiente Liberal (GIL) consiguió una vez más renovar su mayoría absoluta en Marbella (Málaga), con 15 concejales, pese a que en esta ocasión el fundador del partido, Jesús Gil, no encabezaba la lista. Julián Muñoz, que saltó recientemente a las revistas del corazón por sus desavenencias matrimoniales y su amistad con la cantante Isabel Pantoja, derrotó a la candidatura socialista liderada por Isabel García Marcos, que sufre su tercera derrota consecutiva, y por la popular Ángeles Muñoz, una apuesta personal del secretario general del PP, Javier Arenas. El GIL, no obstante, sí registró un fuerte retroceso en Ronda (Málaga), donde perdió tres de los ocho concejales que tenía. En esta ciudad, los socialistas se hicieron con la mayoría.
En Jerez, el PSOE se convirtió en la primera fuerza y arrebataba la alcadía al nacionalista Pedro Pacheco, que sufrió su primera derrota en siete convocatorias. Pacheco, histórico dirigente andalucista, se presentó en estas elecciones con un nuevo partido, el PSA.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 26 de mayo de 2003