Un nuevo accidente laboral pasó ayer a engrosar la lista de empleados muertos en el puesto de trabajo. Un operario de la construcción de 60 años falleció a primera hora de la tarde al caer de un andamio de tres metros de altura en la obra en la que trabajaba en Piera (Anoia). El albañil, vecino de Sabadell, se precipitó al vacío cuando recubría con granito en la fachada de un garaje en la calle de Sant Cristòfol de esta localidad.
Fuentes sindicales de UGT informaron de que el fallecido, cuya identidad no fue facilitada, era empleado de la empresa Ros Construccions i Serveis, SL, con sede en Terrassa, y de que la obra en la que trabajaba no disponía de las medidas de seguridad adecuadas para prevenir los riesgos laborales.
Casi un tercio de los trabajadores fallecidos desde enero hasta abril de este año pertenecen al sector de la construcción, que ha registrado 14 accidentes mortales de un total de 44. Las muertes en el trabajo se han reducido el 24% en comparación con los cuatro primeros meses de 2002.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 3 de junio de 2003