Una galería del barrio madrileño de las Letras, contagiada por la vorágine de la Feria del Libro, expone el trabajo de una artista especializada en trasladar las páginas al lienzo y la escultura. Las obras, a semejanza de los diseños del modernista Fortuny, sugieren en sus pliegues los misterios de la línea. Ana Sánchez (Salamanca, 1964), becada por instituciones como La Casa de Velázquez o la Fundación Miró, ya ha llevado sus libros pictóricos por distintas capitales españolas.
Entre líneas. Galería Raquel Ponce (Alameda, 3). Hasta el 7 de junio.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 4 de junio de 2003