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OPINIÓN DEL LECTOR

Hacinar niños

Si consultamos en el Diccionario de la Lengua Española la palabra hacinar nos encontramos con dos acepciones: Poner los haces unos sobre otros formando hacina / Amontonar, acumular, juntar sin orden.

Si estuviésemos hablando de haces de hierba, la primera acepción sería la que elegiríamos. Pero cuando estamos hablando de niños de cuatro años, entonces elegiremos sin duda la segunda y sobre todo cuando tenemos en cuenta que esto es lo que pretende hacer el señor Inspector de Zona en Mairena del Aljarafe, al subir la ratio a 27 alumnos en las unidades de este nivel.

Sí, señor inspector, usted está amontonando niños sin más, sin orden ni concierto.

¿Cómo pretende la Administración que en nuestro centro, con dos alumnos de Necesidades Educativas Especiales integrados en las aulas de Educación Infantil de cuatro años, trabajemos el próximo curso con 27 alumnos? ¿Cómo podemos garantizar la debida atención a la que tienen derecho estos alumnos? ¿Cómo garantizamos la debida atención al resto de los alumnos?

Así no estaremos educando, así estaremos, como ordena el señor inspector, hacinando. Quizás la Administración considere que somos supermaestros, por ello le pediríamos encarecidamente que en el próximo envío de material al centro no se olviden de incluir las tan famosas capas azules, tal vez con ellas nuestro trabajo se haga más liviano.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 10 de junio de 2003