Los trabajadores de Renfe mantuvieron ayer a mediodía un paro de media hora, convocado por el comité laboral intercentros en recuerdo de las víctimas del accidente de Chinchilla. La protesta paralizó todos los trenes y los restantes servicios. En la imagen, empleados de Renfe llenan el vestíbulo de la estación de Chamartín, en Madrid.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 10 de junio de 2003