El coordinador general de Esquerra Unida, Joan Ribó, manifestó ayer que "la sensación generalizada es que en la capital [de España] y en el conjunto del Estado se está extendiendo el modelo siciliano de Eduardo Zaplana de comprar voluntades y alterar las voluntades democráticas a través de maniobras turbias". Ribó exigió al Partido Popular "un comportamiento ético" en la próxima elección a la presidencia de la Comunidad de Madrid "si es que en ese partido queda un grano de honestidad y honradez".
"Cuando los investigadores analizan un crimen, la primera regla es averiguar quién sale beneficiado, y en este caso todo el mundo lo tiene muy claro", prosiguió Ribó, "Aprovecharse [de la situación creada en la Asamblea de Madrid] sería bendecir el comportamiento de dos individuos que han de ser expulsados muy pronto no sólo del PSOE, sino de la práctica política. Este episodio contribuye decisivamente al descrédito y el desprestigio de la política entre la sociedad y eso tiene un claro beneficiario, el PP, a quien sus electores no suelen penalizar por sus actitudes impúdicas y faltas de cualquier tipo de ética".
Para Joan Ribó, son muy graves los intentos "antidemocráticos de satanizar a Izquierda Unida en todo el Estado" y las declaraciones de "los tránsfugas del PSOE son cínicas, intolerables y no responden a la realidad". "Otra cosa es que en España estén actuando fuerzas subterráneas para impedir de forma antidemocrática gobiernos progresistas", sentenció el coordinador de Esquerra Unida y portavoz de L'Entesa en las Cortes Valencianas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 12 de junio de 2003